Mi experiencia de
alfabetización inicial fue con mi papá quien con una buena disposición y sobre
todo paciencia tomaba una hoja y me escribía mi nombre. Lo hizo tantas veces
que comencé el jardín sabiéndolo escribir. También contábamos los números juntos cuando
nos íbamos a dormir.
Todo
esto fue inolvidable en mi vida, porque siempre separaba de su tiempo para
dedicarse a mí. Mis primeros años escolares fueron medio traumáticos, pero con
el tiempo los pude superar.
Lorena
No hay comentarios.:
Publicar un comentario